«Sembrando el caos en la Unión Soviética sustituiremos sus valores, sin
que sea percibido, por otros falsos, y les obligaremos a creer en ellos.
Encontraremos a nuestros aliados y correligionarios en la propia Rusia.
Episodio tras episodio se va a representar por sus proporciones una
grandiosa tragedia, la de la muerte del más irreductible pueblo en la
tierra, la tragedia de la definitiva e irreversible extinción de su
autoconciencia. De la literatura y el arte, por ejemplo, haremos
desaparecer su carga social. Deshabituaremos a los artistas, les
quitaremos las ganas de dedicarse al arte, a la investigación de los
procesos que se desarrollan en el interior de la sociedad. Literatura,
cine, teatro, deberán reflejar y enaltecer los más bajos sentimientos
humanos. Apoyaremos y encumbraremos por todos los medios a los
denominados artistas que comenzarán a sembrar e inculcar en la
conciencia humana el culto del sexo, de la violencia, el sadismo, la
traición. En una palabra: cualquier tipo de inmoralidad. En la dirección
del Estado crearemos el caos y la confusión. De una manera
imperceptible, pero activa y constante, propiciaremos el despotismo de
los funcionarios, el soborno, la corrupción, la falta de principios. La
honradez y la honestidad serán ridiculizadas [como] innecesarias y
convertidas en un vestigio del pasado. El descaro, la insolencia, el
engaño y la mentira, el alcoholismo [y] la drogadicción, el miedo
irracional entre semejantes, la traición, el nacionalismo, la enemistad
entre los pueblos y, ante todo, el odio al pueblo ruso; todo esto es lo
que vamos a cultivar hábilmente hasta que reviente como el capullo de
una flor.
Sólo unos pocos acertarán a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando la manera de calumniarlos, desacreditarlos y señalarlos como desechos de la sociedad. Haremos parecer chabacanos los fundamentos de la moralidad, destruyéndolos. Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos, pervertiremos (…)».
Allen Wels Dulles
Extracto del libro The Craft of Intelligence (El arte de la Inteligencia, 1963).
Dulles fue director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) entre 1953 y 1961.
Sólo unos pocos acertarán a sospechar e incluso comprender lo que realmente sucede. Pero a esa gente la situaremos en una posición de indefensión, ridiculizándolos, encontrando la manera de calumniarlos, desacreditarlos y señalarlos como desechos de la sociedad. Haremos parecer chabacanos los fundamentos de la moralidad, destruyéndolos. Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos, pervertiremos (…)».
Allen Wels Dulles
Extracto del libro The Craft of Intelligence (El arte de la Inteligencia, 1963).
Dulles fue director de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA) entre 1953 y 1961.
Fuente:http://ciudad-futura.net/2009/12/16/cia-caos/