Según
el ex-fiscal Anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo,”el Tribunal
Supremo es una casta de burócratas al servicio de la venganza”. Así se
manifestó al conocer el fallo del Tribunal Supremo que ha condenado a
Baltasar Garzón a 11 años de inhabilitación por las escuchas de la trama
Gürtel. Villarejo cree que “el Supremo es un tribunal arrodillado a la
corrupción que representa Gürtel”. Asegura que con esta sentencia los
jueces Luciano Varela y Manuel Marchena “han acreditado su enemistad
expresa” con Baltasar Garzón. “A partir de un tribunal que es nulo, de
una sentencia que carece de fundamentos rigurosos y la culminación de
una venganza institucional, es un día para estar abochornado”.
El Supremo es un tribunal arrodillado a la corrupción que representa
Gürtel; hoy es un día de vergüenza para el sistema democrático, judicial
y para el Tribunal Supremo”.
Villarejo señala que “nunca podrán perdonar a un juez como Garzón,
que ha ordenado la detención de Pinochet, que ha girado 180 grados la
justicia universal, que ha puesto en marcha los mecanismos de la
persecución de la delincuencia financiera, que ha hecho frente como
nadie al terrorismo de Estado de los GAL o que ha impulsado como nadie
lo que ahora estamos viviendo como el final del terrorismo de ETA”.