El 'exclusivo Observatorio', la NED y la derecha española

Octavio Fraga Guerra.- No me puedo sustraer –ni quiero-, del artículo titulado: “La NED sigue apostando al duro en la subversión contra Cuba” (1), publicado en varios medios de comunicación “alternativos” y blog, cuyo contenido desentraña la madeja de financiamiento materializado en el 2011 destinado hacia la “Gran Isla del Caribe”.
Es importante recordar que la NED, (National Endowment for Democracy) es una tapadera de la CIA, -como otras tantas-, que obviamente responde a la política exterior del gobierno de los Estados Unidos. Su accionar es -en toda regla- una intromisión en los asuntos internos de Cuba, violando los más elementales principios del derecho internacional y las normas de la política exterior vigente en buena parte del mundo.
 
El objetivo es claro, continuar apoyando las acciones de desestabilización en contra de la Revolución Cubana que buscan construir pretextos para intervenir con acciones directas en el país.
 
En una primera parte del artículo su autor Luis Miguel Rosales comenta: “En este sentido vale señalar que la NED reconoce que su trabajo contra Cuba se encaminó a trabajar con aquellos sectores insertados en el trabajo por cuenta propia, buscando utilizar este sector con fines contrarrevolucionarios, sin abandonar a los tradicionales receptores del apoyo financiero yanqui en Cuba. Asimismo, destinó cuantiosos recursos para utilizar el acceso a los últimos adelantos científico-técnicos y de comunicaciones a “periodistas” y a jóvenes que respondan a los intereses norteamericanos en la Isla”.
 
Esta reflexión es fundamental. En ella se desvela no solo la continuidad de los apoyos financieros a los mal llamados “disidentes”, que son bien conocidos por el pueblo cubano. La labor mercenaria de estos asalariados al servicio del gobierno de los Estados Unidos y en particular a la Oficina de Intereses de la nación norteña radicada en La Habana, está bien documentada como para no caer en sorpresas en tiempos donde el intervencionismo se acrecienta en nuestro planeta.
 
Las “mirillas” de la NED, amplían su espectro hacia otros sectores de la sociedad. El empeño de ingresar en territorio cubano tecnologías y recursos –muchas de ellas costosas y con fines de inteligencia-, forman parte de ese entramado que aspira a profundizar y calar en los diferentes sectores de la sociedad. Esta estrategia se articula en medio de los cambios económicos y sociales que avanzan en Cuba, bajo la expresa voluntad del pueblo.
 
Sobre este particular asunto su autor señala. “Otras líneas generales del trabajo contra Cuba desarrollado por la NED en el 2011 se relacionan con el abastecimiento a los denominados “actores emergentes” en Cuba (jóvenes, artistas, blogueros, mujeres e iglesias) y el apoyo brindado a los ex reclusos cubanos que salieron hacia España como parte de los acuerdos entre los gobiernos cubano y español y la Iglesia Católica Cubana. Con ese apoyo se ha financiado todo el trabajo que han desarrollado estos ex presos, en su mayoría delincuentes comunes, contra Cuba en otros países”.
 
El texto aporta una desglosada y detallada distribución del dinero en las diferentes líneas y objetivos de la NED, dibujando una panorámica del abanico al que van dirigidos estos fondos. Su lectura completa la cartografía de la idea que al principio de este artículo comento como algo esencial.
 
Sin embargo cabe apuntar algunas particularidades de este asunto, esbozado en el artículo. Su autor señala al “Observatorio Cubano de Derechos Humanos” radicado en Madrid. Como bien apunta Luis Miguel Rosales, esta pérfida “organización” y lo cito: “la integran ex reclusos cubanos que salieron hacia España como parte de los acuerdos antes mencionados y que ahora son utilizados para promover campañas contra Cuba en aquellos países donde están radicados, en especial en España, desarrollando talleres, dando conferencias, publicando artículos o desarrollando acciones hostiles y provocativas contra las representaciones diplomáticas cubanas”. La cifra de financiamiento para este engendro es de 67 434 dólares.
 
El “Observatorio” lo preside la contrarrevolucionaria cubana Elena Larrinaga y lo integra un grupo reducido y exclusivo de expresos radicados en España, -entre otros Raúl Rivero-, que cuentan no solo con el apoyo de las diferentes agencias y tapaderas del gobierno de los Estados Unidos. El Partido Popular y la Comunidad de Madrid, forman parte de los financiadores de esta “ONG”, desvelándose una clara participación e intromisión de la derecha española en la política interna de Cuba.
 
La labor de la NED es selectiva. No todas las tareas son publicadas y se desclasifican con el tiempo. Este exclusivo grupo se ha desentendido de los expresos radicados en España. El dinero de la NED les permite mantener un nivel de vida distante de la crisis que vive buena parte del pueblo español. Su trabajo de mercenarios se articula como parte de una labor que busca apoyos no solo en los gobiernos de occidente.
 
Con sus “giras internacionales, desayunos de buenas intenciones, comidas a la carta y cenas de trabajo”, pretenden “profundizar” en la realidad de Cuba, desde la mentira, la manipulación, y el servilismo.
 
Con esta “faena” certifican su labor mercenaria al servicio del gobierno de los Estados Unidos y las demás administraciones de los países donde están radicados. A estos “observadores”, -en definitiva-, les paga los contribuyentes de cada nación.
 
La voluntad y los principios de la Nación Cubana no se amedrentan con “Observatorios” de baja catadura moral. La unidad de los cubanos es la clave de la Revolución. Los asalariados del imperio lo saben, pero han apostado por el negocio de la contrarrevolución.
 

0 comentarios:

Publica un comentari a l'entrada

Gràcies per el teu comentari.