La Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Sabadell se concentra esta mañana ante la sede de Unnim en Sabadell después que los Mossos d'Esquadra desalojaran este domingo por la noche la oficina que ocupaban desde el pasado jueves. El motivo del encierro era la petición de dación en pago para un vecino de la localidad. El colectivo tiene previsto reunirse con representantes de Unnim a media mañana.
La presión de las sesenta personas que se encuentran ante la sede sabadellense ha obligado a la entidad a no abrir la oficina esta mañana, dejando entrar en cuentagotas a los clientes que exigen poder hacer sus operaciones con normalidad. El colectivo defiende a un vecino de la ciudad que se ha encontrado en un callejón sin salida, como tantos ciudadanos que no pueden afrontar las hipotecas concedidas en tiempos mejores.
Ahmed Khennoussa adquirió un piso en el barrio de Torre-Romeu de Sabadell en el año 2002, cuando disponía de un trabajo que le permitía asumir la cuota de la hipoteca, contratada con Caixa Sabadell. En 2011 se quedó sin trabajo, y al poco tiempo la PAH le ofreció apoyo en lo jurídico y lo práctico. Con mujer y tres hijas, una de ellas un bebé, finalmente se consiguió un acuerdo con la entidad financiera, ahora Unnim BBVA.
El pasado jueves la entidad lo citó para abordar la dación en pago del piso en la oficina del barrio, pero una vez allí se le comunicó que debía abonar una cantidad de 4.300 euros, lo que provocó el enojo de los miembros de la PAH que acompañaban al hombre. “Es incomprensible que a alguien que no tiene más que 400 euros de ayuda para subsistir al mes le impongan una suma tan elevada, no tiene ningún sentido”, señala el portavoz de la plataforma, Pau Llonch. El colectivo decidió entrara a la oficina y no moverse de su interior desde el jueves por la tarde.
La aventura finalizó ayer por la noche, cuando los Mossos d'Esquadra identificaron a los ocupantes de la oficina y posteriormente la desalojaron. La actuación policial les llevó a organizar las acciones en las principales oficinas de Unnim en la ciudad, entre ellas la sede central de la antigua Caixa Sabadell, que siguemcon la puerta de hierro colado cerrada bajo la atenta mirada de un agente de seguridad privada.
La previsión es que a media mañana representantes de la entidad se desplacen hasta Sabadell para reunirse con unos cinco miembros del colectivo, que insistirán una vez más en la necesidad de conceder la dación en pago
